Té chai latte: cómo preparar una de las bebidas del momento
¿Te gustan las bebidas originales, con sabor? Prueba esta receta de té chai y te sorprenderá su sabor. Aquí tienes los pasos.
Paladear un té chai latte es todo un lujo. El té chai es una mezcla de té verde o negro aderezado con especias y hierbas aromáticas. Si bien para nosotros los europeos puede resultar una bebida nueva, en realidad no lo es, se trata de una bebida típica del sur de la India a la que llaman masala chai, muy consumida por todo el mundo.
Las especias que tradicionalmente se le agregan son cardamomo, pimienta, anís estrella, clavo, canela y jengibre, aunque al oeste de la India no se le pone anís ni pimienta, lo hacen con té verde y se le añade almendras y a veces azafrán. Como se ve, es una preparación que admite distintas versiones. En la actualidad, el té chai ya se vende preparado, aunque los puristas pueden elaborar sus propias mezclas, si así lo prefieren. En todo caso, al té chai se le puede agregar agua o leche caliente, e incluso en días veraniegos se puede tomar frío y batido con nata montada, toda una exquisitez. Los ingredientes que se dan en esta receta de té chai latte son para 6 tazas.
Ingredientes:
Cómo preparar el mejor té chai latte:
- En una cacerola amplia, calentar todas las especias a fuego medio para potenciar su aroma y sabor.
- Pelar y trocear el jengibre fresco.
- Añadir a la cacerola el agua y el jengibre y llevar a ebullición.
- El agua nunca debe llegar a hervir, justo antes retirar del fuego, tapar la cacerola y dejar reposar de 3 a 4 minutos.
- Transcurrido el tiempo, colar y desechar las especias.
- Repartir el té en las seis tazas y llenar solo ¾ partes de la capacidad.
- Completar con la leche caliente.
- Servir.
Le puedes espolvorear un poco de canela molida a cada taza de té chai latte, y si te gustan los sabores intensos, hasta un poco más de cardamomo molido. La cantidad de leche dependerá del gusto de cada quien, hay quien prefiere poner tan solo la mitad y el resto de leche. Añade azúcar al gusto si lo prefieres.
Si quieres que tenga espuma, lo que puedes hacer es espumar la leche antes de servirla en las tazas. Y si lo quieres frío, agrega la leche fría y unos cubitos de hielo, déjalo en la nevera un rato y ya tendrás listo tu té chai latte frío.